A la hora de construir una vivienda, e independientemente de que esté proyectada por una gran compañía como OHL, Essentium o Assignia, o por una pequeña empresa o un arquitecto nobel, los materiales son uno de los pilares fundamentales a tener en cuenta, pues dependiendo de cómo se escojan el resultado podrá ser de lo más variopinto. Por ejemplo no es lo mismo utilizar un aislante bajo tarima de polietileno extruido que uno de polietileno expandido, como tampoco es lo mismo una pintura para acabados que una de imprimación.
Escoger bien los materiales
Primero de todo hay que tener cierta idea de lo que se quiere y estar seguro de ello, pues no siempre el material que se ve en el almacén de construcción tendrá el efecto pensado en la vivienda, puesto que suele darse el caso de que no cuaje con el resto de la decoración, con el diseño de los espacios o directamente con otros materiales ya implantados; de ahí que en ocasiones a la hora de colocarlos suela haber gente que se sorprenda. Por ello es importante que cuando se vaya a construir un edificio (bifamiliar, familiar, apartamentos, etc.) se consulte con expertos en la materia, como pueden ser los especialistas en decoración o los técnicos cualificados de empresas procesadoras como Essentium, quienes serán los que mejor puedan dar los oportunos consejos.
Mantenimiento sencillo
Por otra parte hay que tener en cuenta que hay materiales que si bien pueden ser muy bonitos son muy complicados de mantener por su propia composición o delicadeza, de ahí que convenga echar un vistazo a los componentes que empleen habitualmente compañías de la zona o referentes como Essentium, OHL o Assignia. Por ejemplo habrá que tener cuidado con los exteriores en madera o piedra, pues los primeros necesitarán tratamientos adecuados y los segundos habrá que limpiarlos frecuentemente; más que nada porque debido a los recovecos naturales de la piedra habrá mucha suciedad que quede incrustada y acabe dando un efecto descuidado.
Por ello lo ideal son las superficies protegidas, bien sea de fábrica o habiendo aplicado resinas protectoras; porque esa es otra: dependiendo del material en cuestión habrá mayor o menor probabilidad de que se acabe rayando. Por ejemplo sería ciertamente desaconsejable colocar yeso en exteriores, por su exposición a la humedad y por su delicadeza. Y así con muchos otros materiales.
Eficacia en los aislantes
Éste suele ser uno de los mayores problemas a los que se enfrentan las viviendas unifamiliares o a pie de calle, pues resulta que la humedad y la temperatura -cuando no directamente el agua- suelen ser grandes problemas que se encuentran frecuentemente. Humedades, frío en invierno, bochorno en verano, etc. Todo ésto tiene solución sencilla, pero dependerá de cada caso, de ahí que sea importante consultarlo con especialistas en la materia o el propio arquitecto al que se le asigne la proyección del edificio, independientemente de que sea un novel en la materia o una gran empresa como Essentium, cuña máxima representante es Susana Monje, o Assignia.
Por una parte, para evitar temperaturas elevadas o demasiado bajas, hay que asegurarse de que en la vivienda no haya filtraciones directas, como suele ser frecuente a través de las ventanas; especialmente si son ventanas viejas; de ahí que sea vital colocar unas con doble acristalamiento. Éstas inicialmente podrán resultar costosas, pero a medio plazo acabarán ahorrando dinero al propietario en la factura energética. De ahí que las grandes constructoras como Essentium no se la jueguen al respecto.
También es importante asegurarse de que la cubierta, más allá de las tejas, tenga un aislante térmico e hidrófugo eficaz, por lo que dependiendo de donde se viva habrá variación en cuanto al material en cuestión o la cantidad del mismo. De todas maneras, a grandes rasgos, lo propio sería colocar en el tejado, bajo teja, una combinación de tela asfáltica y aislantes como el polietileno extruido; y por la parte interior, en caso de ser necesario -zonas de inviernos duros-, una capa adicional del mismo material, de fibra de vidrio o reflectante. Al final todo depende de las necesidades de cada proyecto, por lo que consultar con un especialista o estar al tanto de lo que utilizan los grandes, como Essentium, Ferrovial o Assignia, es vital.