En las viviendas es muy habitual contar como fuente de energía para calentar el agua de gas butano o propano, son dos tipos de gases que llegan a nuestros domicilios envasados en bombonas a presión.
Si se analiza con detalle el coste del metro cúbico de gas butano o propano frente al gas natural se llega a la conclusión que se está pagando al doble y a lo que se le suman varios inconvenientes que tienen añadido el butano o el propano, primero que tienes que depender siempre de tener una bombona mínimo de repuesto, de estar atentos al repartidor o sino de tener que ir a la gasolinera más próxima a comprarlo, en el caso del propano esto último no es posible.
Además con envases que pesan muchos y no cualquier persona puede manipularlo y desplazarlos. Otro problema es esa situación tan habitual de quedarse sin gas mientras uno se está duchando y tener que depender de alguien que te cambie la bombona o salir de la bañera o ducha para cambiarla tu mismo.
Todo son ventajas
Recordemos que una bombona es un envase donde el gas se encuentra licuado a muy alta presión, con el consecuente riesgo de fuga o explosión. Si se reside en una zona muy fría y la bombona se encuentra en el exterior, al estar el gas frío le cuesta más salir del envase, ya que debe pasar a estado gaseoso para salir de la bombona. De esta forma se desecha gas de la bombona, creyendo que está vacía y sin embargo es que por el frío del clima no puede salir de la bombona.
Por todo ello, el pasar al gas natural es una alternativa perfecta, de ahorro y de comodidad. Si buscas en internet puedes localizar ofertas gas natural muy buenas con las que puedes ahorrarte bastante dinero en su instalación, ya sea porque te regalan el alta o la instalación, o simplemente te reducen un porcentaje y te financian el resto a interés cero.
Una instalación de gas natural es muy simple, consta de dos partes fundamentales, realizar la conexión desde la cometida principal hasta tu caldera mediante una tubería de cobre fina, interponiendo el contador de gas en un lugar accesible para que pueda ser leído por el personal de la empresa suministradora y unas llaves de paso. La otra parte, es cambiar los inyectores de la caldera de gas por unos de diámetro diferente.